Como cada año al acabar la Semana Santa comienza la operación bikini, es una carrera absurda para llegar con el cuerpo más canónico posible a las ansiadas y merecidas vacaciones de verano.
Se llama operación bikini, y no era casual, porque va dirigida principalmente a las mujeres. Es cierto que la presión se va extendiendo un poco más hacia los hombres, pero el blanco sin duda de la misma, somos nosotras.
Nos han enseñado que nuestro cuerpo está mal y tiene que encajar o acercarse lo más posible a unos cánones estéticos, que como moda que son, cambian sin cesar. Ante tanta exigencia imposible, a veces escondemos nuestros cuerpos, o nos castigamos no haciendo o poniéndonos la ropa que nos gusta, porque pensamos que eso no es para nuestro cuerpo.
Quizás sea hora de abrir los ojos, y darnos cuenta de que nuestro cuerpo es perfecto tal y como es y qué no necesita encajar en ningún modelo para disfrutar y vivir plenamente en él.
En este artículo os dejo unas claves para tomar conciencia y después ir saliendo de esta trampa que nos han vendido, no es salud, es estética.
Espero que os guste y os ayude.
Un abrazo.
Azahara
